Partido Republicano solicita al Gobierno tener prescindencia del proceso constitucional

Ante las advertencias de la Ministra de la Mujer sobre la norma que protege la vida de “quién está por nacer”, el grupo liderado por Kast llamó a no ridiculizar el debate del Consejo Constitucional.

 

*Por Equipo La Neta

 

El miércoles 20 de septiembre, mismo día en que el Consejo Constitucional aprobó la norma que establece “la protección de quién está por nacer”, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, se refirió a esta como un retroceso para los derechos de las mujeres

 

Aunque la titular de cartera no emitió sus opiniones en nombre del Gobierno, sí manifestó su preocupación por la norma, porque de aprobarse la propuesta, podría derogar la ley de interrupción voluntaria del embarazo en tres causales, que rige en el país desde hace seis años.

 

Además, señaló que este riesgo también podría ser extensivo a la entrega de los anticonceptivos de emergencia. “La pastilla del día después ha sido tan importante, sobre todo en casos de violación, y también en casos de embarazo adolescente en Chile, esto se llevó al Tribunal Constitucional, y ni siquiera la Constitución del 80’ era incompatible con ella”.

 

Los comentarios de Orellana en Radio ADN no pasaron desapercibidos en la bancada republicana del Consejo Constitucional. Consultada por esto, la consejera del sector y presidenta del órgano, Beatriz Hevia, aseveró que “vulnera el análisis objetivo de las normas” y además ridiculiza el trabajo de redacción de la propuesta constitucional. 

 

Yo creo que el Consejo Constitucional ha sido bien respetuoso y prudente con todas las definiciones y toda la contingencia que ocurre en el país y, lo mínimo que uno espera, es reciprocidad”, declaró la consejera republicana.

 

Junto con esto, llamó al Gobierno a tener un rol de prescindencia en lo resta del proceso constitucional. Espero que hoy día lo que hagan sea tener una definición clara una vez que conozcan finalmente el texto y no caer en la ridiculización y el absurdo del debate”.